Revista Informar
"El pairo es como el cerdo: No tiene desperdicio"
13 DE OCTUBRE DE 2016

Llevas todo el día dando bandazos. Necesitas un poco de calma para cocinar o para apretar un tornillo o... Mil situaciones donde necesitas una tregua, que todo ese movimiento se calme. La solución: ponerte "al pairo".
ALFONSO RUIZ DE LOBERA
Llevas todo el día dando bandazos, o pantocazos. Necesitas un poco de calma para cocinar y comer tranquilo, o tal vez para apretar un tornillo del motor, o guarnir un cabo de rizo o… Mil situaciones donde necesitas una tregua, que todo ese movimiento se calme. Apaciguar esa marejada que no tiene clemencia… La solución: ponerte “al pairo”.
Aprende a ponerte al pairo. Es fácil, pero cada barco tiene sus particularidades. Como siempre te recomiendo que busques conocimiento experto que te enseñe.
La forma más directa (y fácil) de ponerse al pairo es desde un rumbo de ceñida, virando por avante sin tocar la escota de la vela de proa y ajustando el timón para que el barco se quede sin arrancada (mira la figura de arriba). Cuando el barco se haya parado, al poco tiempo, se forma una ESTELA DE REMOLINOS a barlovento que es la señal inequívoca de que lo estamos haciendo bien.
¡ATENCIÓN! Esta estela es la que te proporciona todas esas ventajas de suavidad de movimientos, por tanto DEBES CONSEGUIR QUE SE FORME.
Debes considerar estos puntos:
? Si no se forma la estela de remolinos es que no estás al pairo. Probablemente debes lascar más la escota de la vela mayor y ajustar convenientemente el timón.
? También puedes ponerte al pairo sólo con la mayor. Es cuestión de ajustar el timón y trimar la vela convenientemente (escotero, escota, pajarín e incluso amantillo). No hay reglas fijas. Experimenta para conseguirlo. El barco queda (generalmente) más aproado a la mar si te pones al pairo sólo con la vela mayor. Esto puede ser conveniente con mal tiempo. Probablemente la mayor estará ya rizada.
? Atención al desgaste, sobre todo si vas a pasar al pairo unas cuantas horas. La escota del génova, si sobrepasa el triangulo de proa, tendrá roces en los obenques. Con un foque pequeño tendrás menos problemas.
LOS CONSEJOS
– Practica ponerte al pairo en diferentes situaciones, con diferentes configuraciones de vela.
– Puedes utilizarlo para tomar rizos, para izar y arriar velas, para descansar, para esperar a que amanezca, a que pase un chubasco, para cocinar, para hacer tus necesidades fisiológicas… ¡para tantas cosas en tantas ocasiones!
– Si hay olas rompientes grandes y corres riesgo de quedarte atravesado no uses esta técnica. Con olas rompientes NUNCA debes permitir que el barco quede al través de la mar.
– Mira en el GPS a qué velocidad derivas en las diferentes condiciones. Apunta estos datos que pueden ser de utilidad si en alguna ocasión tienes que permanecer largo tiempo al pairo.
– Aunque estés parado no debes descuidar la vigilancia del tráfico marítimo a tu alrededor.
– Y por último: DISFRUTA de la mejora de las condiciones que te proporciona esta técnica que a un neófito le hará exclamar: “Ver para creer”