Revista Informar
PILAR TEJO FUE LA PRIMERA MUJER DIRECTORA DE SALVAMENTO MARÍTIMO
Mujer y Mar
23 DE OCTUBRE DE 2023
“Ser de las primeras mujeres ingenieras navales me produjo orgullo porque sabía que estaba abriendo un camino para las que vinieran detrás”
Maite Cabrerizo
Es una de las cuatro primeras mujeres que se tituló en España como Ingeniera Naval. La primera mujer en recibir el Premio AINE, otorgado por la Asociación de Ingenieros Navales, en el año 2009, en la modalidad de Ingeniero Naval con Trayectoria más Destacada. La primera mujer directora de Salvamento Marítimo en un mundo de marinos. Vamos a la primera pregunta porque, “aunque no le llegan las horas del día”, Pilar Tejo Mora, para Salvamento Marítimo siempre tiene tiempo. “Fue una experiencia muy interesante y enriquecedora desde muchos puntos de vista: el profesional, el técnico, el personal y el humano. Creo que fui muy afortunada”.
Lo fue ella como directora y quienes trabajaron con ella (julio 2004- enero 2010), un periodo en que la sociedad creció en medios y en profesionales. “Dispusimos de un presupuesto extraordinariamente elevado para el Plan Nacional de Salvamento lo que permitió generar una muy bien dotada flota de medios marítimos y aéreos, además de una red de bases logísticas y una sustancial mejora en los sistemas de los Centros de Salvamento”. Salvamento Marítimo español empezaba a configurarse como uno de los mejores a nivel internacional, “lo cual tenía todo su sentido dada la amplitud y complejidad de la zona SAR de responsabilidad de nuestro país”.
“Fue una experiencia muy interesante y enriquecedora desde muchos puntos de vista: el profesional, el técnico, el personal y el humano”
Una de las mejores sociedades de salvamento en medios, y como recuerda con cariño Pilar Tejo, también de profesionales que han dejado huella en su vida. “Un equipo humano de gran valía y enorme motivación, que era consciente de la relevancia de la misión encomendada”. Muchos años y muchos nombres que no se olvidan, que la emocionan. “No puedo dejar de citar a Jesús Uribe, director de Operaciones ya fallecido que, junto con sus colaboradores más próximos, Pablo Guevara, Pedro Sánchez y Juan Moreno, y por supuesto todos los demás, trabajaron sin descanso y con una gran ilusión para desarrollar la entidad”.
Dejaron huella las personas y las emergencias a las que había que dar siempre la mejor respuesta. “Y ahí estaban los jefes de los Centros de Salvamento de los que guardo un gran recuerdo, los controladores y los medios con sus tripulaciones, dando lo mejor de sí mismos. La verdad es que fue un periodo muy fructífero y, además me permitió conocer a grandes profesionales y personas, y hacer muy buenos amigos”.
Pasión por la ingeniería
Estudió la carrera en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Navales de Madrid (entonces era la única en España). No fue un amor al mar a primera vista por la mar, si no por la ingeniería. Su padre era ingeniero aeronáutico vocacional, una pasión que contagió a Pilar Tejo. “De alguna manera me vi en ese espejo, pero claro cambié el aire por el mar tal vez precisamente por no estar especialmente vinculada a él y por una visión supongo más poética que realista”.
Mujer de no rendirse; de si te caes 7 veces, levántate la octava. Acabó la carrera en 1982 “y te aseguro que al acabar me sentí francamente bien. Era una carrera muy dura y finalizarla fue una gran satisfacción. Y ser una de las primeras mujeres también me produjo orgullo porque sabía que estaba abriendo un camino para las que vinieran detrás. Igual que yo me había beneficiado de lo que hicieron tantas mujeres antes de mí para que yo pudiera estar ahí, me refiero a la lucha de la mujer para poder hacer estudios universitarios, y específicamente estudios técnicos (la primera mujer ingeniera industrial fue Pilar Careaga en 1929).
“Ser una de las primeras mujeres también me produjo orgullo porque sabía que estaba abriendo un camino para las que vinieran detrás”
La historia ha cambiado. La lucha de esas mujeres, muchas desconocidas, han dado un giro a las estadísticas. Pilar Tejo lo sabe. “Ahora ya se aproximan al 50% los egresados que son mujeres en el conjunto de titulaciones superiores en Ingeniería y Arquitectura, aunque en mi carrera, en Ingeniería Naval, el porcentaje es inferior, en torno al 30%. Y no sólo eso ha cambiado, es que, en general, la sociedad, las empresas, los profesionales ya ven normal a mujeres ingenieras en cualquiera de las ramas de la ingeniería, y desde luego en la nuestra, con colegas que están desempeñando puestos de gran responsabilidad y de todo tipo, por ejemplo, en Salvamento Marítimo”.
La conversación vuelve a Salvamento Marítimo, a un Plan de Igualdad que ha sido premiado y reconocido. Hay sectores, como es el caso de controladoras, donde el porcentaje es mayor y llega al 50%. “Yo creo que Salvamento Marítimo ha ido evolucionando en este asunto de forma similar a que lo ha hecho nuestra sociedad y, específicamente, en este sector tradicionalmente masculino. El que ya el 50% de los controladores sean mujeres es un dato claro de esto que digo. Supongo que, en la flota, marítima y aérea, este porcentaje será inferior, pero será cuestión de tiempo, sin duda, que exista un equilibrio. ¡Todavía recuerdo cuando llegó la primera mujer comandante de helicóptero a la base de Gijón! Llegan las primeras y van abriendo camino a las que llegan después”.
Hay también un Plan de Igualdad en los nombres de los barcos en homenaje a mujeres relevantes en la historia por su defensa de los derechos de la mujer: María Zambrano, Clara Campoamor, Marta Mata, María Pita, María de Maeztu y Concepción Arenal. O el esperado Heroínas de Sálvora. “Lo del nombre de las embarcaciones tiene su miga. Para las salvamares no había duda, siempre llevaban nombre de estrellas o constelaciones. Para los buques se buscaron nombre de mujeres relevantes, de esas que eran menos conocidas por su condición de mujer a pesar de su importancia, también se hizo esto mismo con los aviones”. La exdirectora de Salvamento Marítimo recuerda “especialmente bonito” el acto de inauguración del buque Clara Campoamor “porque, reivindicando su logro del voto femenino, se reprodujo un fragmento del debate parlamentario. Fue un acto entrañable y a la vez esclarecedor de la situación de las mujeres en aquella época. “¡Había que oír a los diputados que se oponían!”.
Habría que oírlos viendo a Pilar Tejo en la dirección. “Creo que para un ingeniero naval el poder ejercer la dirección de Salvamento Marítimo es una gran suerte, el actual director también es ingeniero naval. Y para Salvamento Marítimo también es una gran suerte tener a un ingeniero naval al frente; a pesar de que es un puesto de libre designación, creo que el que se designe a un profesional de esta actividad es muy bueno porque de algún modo asegura que el criterio técnico esté muy presente en la toma de decisiones”.
Horas, esfuerzos, viajes… ¿Mereció la pena? Ni décimas de segundo tarda en responder. La respuesta está clara. "Mereció la pena. Pensar que quien tiene un problema en la mar va a poder sentirse seguro y atendido porque está Salvamento Marítimo para ello, o para cuidar del medioambiente, claro que merece la pena. Aunque no nos veas, siempre estamos ahí era uno de sus eslóganes. Salvamento Marítimo es especial”.
Actualmente, además de ser directora técnica de la Asociación Española para la Promoción del Transporte Marítimo de Corta Distancia, es también la decana del Colegio Oficial de Ingenieros Navales y Oceánicos de España y socia directora de Teirlog Ingeniería. Y eso se traduce en mucho trabajo, incluyendo los fines de semana. “Aunque a eso ya me habitué en Salvamento donde no había ni fines de semana ni noches. Es más, las emergencias más complejas tenían una especial habilidad por producirse en las noches de los viernes o sábados. Mi familia estaba ya acostumbrada a las llamadas a horas intempestivas y a que abandonase cualquier actividad lúdica o familiar. Ahora es muy diferente, claro, porque es otro tipo de trabajo, pero la intensidad es casi igual de elevada…."
Le preguntamos por la famosa conciliación trabajo/vida, trabajo/familia, trabajo/tiempo libre... ese binomio imposible que mujeres como Pilar Tejo lo hacen posible. “¿Cómo se concilia? Pues con mucho cuidado. Creo que las mujeres en eso tenemos una especial habilidad para estar en todo y al mismo tiempo concentrarnos en la tarea específica que hacemos en cada momento. Pero al final, se trata de sacrificar unas actividades en favor de otras”. Tiene tres hijos. Sabe de lo que habla. Por eso deja un mensaje a las jóvenes que aún dudan si hacer una ingeniería. “Este es un tema en el que estamos muy empeñados desde el Colegio: el atraer más vocaciones a nuestra profesión, y desde luego, mujeres”.
“No hay nada que una mujer no pueda conseguir con el esfuerzo y el tesón necesarios”.
Las palabras de Tejo recuerdan a las de Coco Chanel. Una mujer ha de ser quien ella quiera ser y lo que ella quiera ser. “No hay nada que una mujer no pueda conseguir con el esfuerzo y el tesón necesarios”. Además, insiste, es una profesión cuyo ejercicio genera una gran satisfacción, cualquiera que sea el ámbito en que se ejerza. En ese sentido, recuerda que se pueden encontrar ingenieros navales además de en el diseño y construcción de buques, en el mundo naviero y en el portuario, en el de las energías de origen marino que van a tomar un gran protagonismo en los próximos años, pero también en sectores industriales y de servicios de lo más diverso. “Y un tema relevante y que creo que a las mujeres nos importa bastante, y no se tiene conciencia de ello: la ingeniería tiene una importante función social: mejora la vida de los ciudadanos; gracias a la ingeniería los países y los territorios prosperan y la calidad de vida de los ciudadanos es mayor. ¿Qué haríamos sin transporte marítimo? Como dijo William A. O'Neil ex-secretario general de la OMI: “Si el transporte marítimo no existiese, la mitad de la humanidad se moriría de hambre y la otra mitad de frío”.
Su empresa
Antes y después de Salvamento Marítimo, Pilar Tejo ha desarrollado la mayor parte de su vida profesional en Teirlog, una consultoría e ingeniería de transporte y logística. “Nos dedicamos a elaborar estrategias y planificación de transporte. Asesoramos, por ejemplo, a los gobiernos autonómicos y al central o a las Autoridades Portuarias sobre materias diversas relacionadas con el transporte. También gestionamos la Asociación de Promoción del Transporte Marítimo de Corta Distancia (TMCD). Trabajamos en España, pero también fuera de España y hemos asesorado a diferentes gobiernos de países LATAM para desarrollar sus puertos, sus redes de transporte o sus plataformas logísticas. Entonces es cuando te das cuenta del gran nivel de nuestro sistema de transporte y del enorme salto que hemos dado como país desde nuestra adhesión a la entonces CEE, lo que dota a nuestra economía de una mayor competitividad”.
Su trayectoria está cargada de momentos únicos, pero los de Salvamento Marítimo son imborrables. “Recuerdo la avalancha de pateras en Canarias en 2006. O el hundimiento del Don Pedro en Ibiza. O la carga del Ostedijk que entró en combustión frente a la costa gallega. O el plan para la seguridad de los buques pesqueros en el que participamos junto con la Dirección General de la Marina Mercante, el Instituto Social de la Marina (ISM), Pesca y la inspección de Trabajo, para reducir la elevada accidentalidad entre los pesqueros… La dejamos navegando en ese mundo de sensaciones que le ha devuelto la entrevista. Su nombre forma parte de la historia de esta Casa. Para siempre.
No podía ser de otra manera. Pilar Tejo no se conforma con leer un libro, sino varios. “Me encanta leer, varios libros a la vez”, nos dice. En su mesilla están El Director de David Jiménez, La invención de la naturaleza: El Nuevo Mundo de A. von Humboldt , de Andrea Wulf, y Lecciones de la Historia de Will y Ariel Durant.
Aún saca tiempo para salir al campo, hacer senderismo y acercarse al mar, sobre todo a Galicia, donde tiene mucha familia. “Y me encantan las reuniones familiares, los fines de semana, disfrutar la compañía de mi gran familia”.
Lo decía Goethe, qué insensato es el hombre que deja transcurrir el tiempo estérilmente”. Juzguen los lectores.