Revista Informar
“LAS TRIPULACIONES DE SALVAMENTO MARÍTIMO SOMOS LOS BOMBEROS DEL MAR”
Las Caras Del Mar
10 DE FEBRERO DE 2025

Juan José Calo es jefe de Máquinas en la Guardamar Talía
Maite Cabrerizo /Lucía Pérez
Parada de Las Caras del Mar en Aguiño (Ribeira). Donde el Atlántico ha forjado el carácter de sus vecinos, gente de mar. Como Juan José Calo. De familia de pescadores, empezó los veranos de jovencito en el cerco para sacarse un dinero y estudiar Máquinas. Siguieron luego largas campañas en el Gran Sol y Malvinas. No era fácil, lejos de la familia por periodos muy largos y campañas donde la mar no siempre ayudaba. Tuvo después la oportunidad de pasar a trabajar a los astilleros en Vigo y, posteriormente, en una fábrica de harina de pescado, de mantenimiento. Estuvo seis años, pero siempre con la mirada puesta en esas aguas que le dan la vida.
Una llamada importante
Le tocaba entonces renovar todos los títulos y no se lo pensó. Volvió al Atlántico, al atún, a hacer días de navegación para obtener el título profesional. Después de cuatro años, con los deberes hechos, envió su currículo a Salvamento Marítimo. En diciembre de 2021 llegó la llamada. “Fue un momento muy importante. No me lo creía porque no estás acostumbrado a que te llamen”, dice modesto. “Supuso el cambio a un trabajo en el que me siento bien; un trabajo muy bonito en el que rescatas a gente que te necesita. Es muy gratificante y te hace sentir orgulloso”.
Orgullo por sus compañeros, por esas dos palabras que le han cambiado la vida: Salvamento Marítimo. Empezó primero de engrasador en buques (Marta Mata, Punta Salinas, Clara Campoamor, Miguel de Cervantes) y luego pasó a marinero en Guardamares. En su última singladura, el 1 de enero de este año, embarcó como jefe de Máquinas en la Guardamar Talía. Cinco días más tarde, el día de Reyes, fue noticia. Le tocaba trabajar. En casa quedaba la pequeña y su mujer Ana, pero el calor de la Nochebuena seguía presente. Una llamada desde la torre de control les dio el aviso de que había embarcación precaria que precisaba asistencia. Cuando salieron de madrugada del puerto de Arrecife ya sabían que en la lancha había una mujer embarazada. Sabían que podrían encontrarse cualquier escenario. Domingo, el capitán, ya había vivido esta experiencia en otras dos ocasiones.
Al llegar al cayuco, sobre las 10 de la mañana, la tripulación se preparó para seguir los protocolos. Juan José sacó su móvil y amplió el zoom para enfocar a sus ocupantes y hacer una primera valoración de número y del estado en el que llegaban. Entre caras de miedo, de sorpresa, de angustia, de debilidad… había un bebé recién nacido. Desnudo, sin ropa, sin nada. Por cómo estaba, dice Juan José, había nacido hace escasos minutos.
La tripulación desembarcó al resto de personas. La mujer y el bebé salieron los últimos. Dos marineros les subieron en la neumática para ayudarlos, y los instalaron en la enfermería de la Guardamar. Pusieron al bebé con la mamá y les abrigaron hasta que llegó el helicóptero.
Un trabajo vocacional
El día de la foto, no era la primera vez que se enfrentaba con pateras. Ya había vivido esa experiencia y, por desgracia, conoce la otra cara de la moneda, la de personas flotando en al mar, sin vida, que te hace reflexionar mucho. No es sencillo volver a tierra sabiendo que no se ha podido hacer nada. Pero enseguida se viene arriba porque, como vecino de Ribeira, sabe que de ellos dependen muchas vidas. Cuando comentó a su familia que entraba a trabajar a Salvamento Marítimo todos le apoyaron. En su pueblo conocen de cerca el dolor de perder a amigos, vecinos, compañeros. “Siempre pasan desgracias. Somos los bomberos de la mar”.
Puede que para la prensa sea un episodio más, pero no para Juanjo, que aún mira la foto con una sonrisa emocionada. “Sé que al llegar a tierra voy a tener que dar explicaciones a Ana. Ya no tengo excusas para no hacer fotos” dice, feliz e insiste, “yo sólo le doy al botón”.
Dicen los estudios que un 62,3% de los españoles hace fotos con el móvil, casi dos puntos más que los japoneses. Menos Juan José. También que el 78% de los españoles se hace varias fotos antes de decidir cuál subirá a su red social. Menos Juan José. Y el 20% de los españoles encuestados afirman sentirse frustrados si sus amigos o familiares no son capaces de sacar ni una foto “decente”. Como la mujer de nuestro jefe de Máquinas de la Guardamar Talía. Juan José repite sonriendo: “Voy a tener que darle muchas explicaciones”.
Os presentamos a la tripulación de la Guardamar Talía que realizó el rescate del cayuco con el bebé a bordo. ¡Porque los barcos los hacen sus tripulaciones! Porque detrás de cada emergencia hay muchas personas que no se ven, pero siempre están. Hoy les ponemos cara:
Capitán Domingo Trujillo
Jefe Máquinas y Fotógrafo (gracias)Juan José Calo Franco.
1º Oficial Antonio Vázquez.
2º Oficial Pablo Álamo.
Marineros Ayoze Alemán, Víctor Manuel Jiménez y Javier Fernández.
Cocinero Adelino Lobelos